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Juntas arbitrales de transporte : ¿cómo puede un TMS ayudarle a resolverlos?

Published on 2 October, 2025
Last Updated 2 October, 2025
5 min
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La ejecución del contrato de transporte implica un cargador (dador de orden) y un transportista. Los litigios de transporte surgen cuando una de las partes no cumple correctamente su misión. Los conflictos pueden adoptar la forma de un daño en la mercancía, una pérdida total, un rechazo o un retraso en la entrega. El tratamiento de los litigios requiere personal y tiempo dedicados a la constitución de expedientes. Veamos con más detalle los diferentes tipos de litigios de transporte y cómo un TMS puede ayudar a gestionarlos mejor y a proteger sus intereses.

  1. ¿Cuáles son los diferentes tipos de litigios en el transporte por carretera de mercancías?
  2. El impacto de los litigios en las empresas
  3. ¿Cómo calcular la indemnización por parte del transportista?
  4. ¿Cómo tratar los litigios de transporte?
  5. ¿Cómo un TMS le ayuda a gestionar sus litigios de transporte?

 

 

¿Cuáles son los diferentes tipos de litigios en el transporte por carretera de mercancías?

La ejecución del contrato de transporte implica un cargador y un transportista. Los litigios de transporte surgen cuando una de las partes no cumple correctamente su misión. Los conflictos pueden adoptar la forma de un daño en la mercancía, una pérdida total, un rechazo o un retraso en la entrega.

En muchos de estos casos, además de la gestión interna o mediante un TMS, los conflictos pueden llegar a resolverse a través de las juntas arbitrales de transporte, organismos especializados creados para solucionar de forma ágil y económica las controversias en el sector.

 

Litigios de entrega


Se refieren al cumplimiento de los plazos o a la integridad de la carga. Los retrasos afectan a la cadena de suministro, provocando desorganización en la producción o en la venta. Las paradas de línea o los productos faltantes impactan directamente al mercado y son imputables al transportista en caso de retraso de entrega.

Los daños en el embalaje o en la carga son también muy frecuentes. Suelen deberse a incidentes de manipulación: golpes de carretilla, productos derramados, materias inutilizables, envases perforados o con fugas, etc.

Los defectos de cantidad incluyen faltantes o excesos. Se habla de faltante cuando la entrega está incompleta, y de exceso cuando contiene productos no pedidos. Estos errores suelen deberse a un mal etiquetado en el proceso de clasificación.

 

Litigios financieros

Aparecen sobre todo en la facturación, cuando no coincide con lo acordado en el contrato. Puede tratarse de una sobrefacturación o subfacturación. Normalmente se resuelven con una nota de crédito o un ajuste.

El departamento comercial suele intervenir, en especial cuando ha habido negociaciones previas sobre tarifas. Un ejemplo típico es el suplemento por combustible, fuente de frecuentes desacuerdos debido a su variación constante.

 

Litigios sobre el contrato de transporte

Surgen cuando no se cumplen las cláusulas contractuales: plazos de carga o entrega, condiciones de pago, transferencia de responsabilidad, etc. También pueden deberse a interpretaciones diferentes del contrato. Aquí también la mediación del departamento comercial puede ser útil.

 

Litigios relacionados con la seguridad y la normativa

Se producen cuando hay infracciones en materia de seguridad o regulación: un conductor que no respeta el protocolo de seguridad, que interviene en la carga indebidamente o que infringe el código de circulación.

Las infracciones medioambientales también generan consecuencias legales y financieras (ejemplo: uso de vehículos que no cumplen la normativa Euro o de remolques no homologados).

 

El impacto de los litigios en las empresas

Los litigios tienen un impacto financiero, administrativo y técnico:

  • Costes directos: sustitución de mercancía, reembolso de equipos, penalizaciones por paradas de producción.
  • Costes indirectos: pérdida de clientes, daños a la reputación, tiempo del personal dedicado a la gestión de reclamaciones, necesidad de recurrir a expertos.
  • Además, desorganizan toda la cadena de suministro, alargando los plazos de entrega y afectando al cliente final.

En este contexto, recurrir a las juntas arbitrales de transporte puede ser una alternativa eficaz a la vía judicial, ya que permiten obtener un laudo con el mismo valor que una sentencia firme, pero en menos tiempo y con menos costes.

 

 

¿Cómo calcular la indemnización por parte del transportista?

Depende del contrato de transporte y del marco legal:

Transporte nacional (Francia): Decreto 2017-461

  • Envíos < 3.000 kg → 33 €/kg bruto perdido o dañado, máx. 1.000 €/unidad de manipulación.
  • Envíos > 3.000 kg → 20 €/kg bruto perdido o dañado, máx. 3.200 €/tonelada.
Transporte internacional (CMR): 8,33 DTS (Derechos Especiales de Giro del FMI) por kg perdido o dañado.

🔹 La indemnización básica se calcula por peso bruto y no por el valor real de la mercancía.
🔹 Para cubrir el valor real, se puede contratar un seguro ad valorem.
🔹 En caso de retraso, sólo una declaración de interés especial o un acuerdo permite ser indemnizado más allá del coste del transporte.
🔹 El transportista puede quedar exonerado en casos de fuerza mayor.

 

 

¿Cómo tratar los litigios de transporte?

  • Notificación: señalar el problema al transportista lo antes posible (por escrito en un plazo de 3 días desde la entrega).
  • Constitución del expediente: reunir carta de porte (CMR), albarán con reservas, factura comercial, nota de crédito, fotos, pruebas, etc.
  • Resolución: la mayoría se resuelven de forma amistosa (compensación o nota de crédito). Los casos más complejos requieren mediación o juicio.

Además de los procedimientos internos, los cargadores y transportistas disponen de la opción de acudir a las juntas arbitrales de transporte cuando la cuantía del litigio lo permite, garantizando una resolución imparcial y especializada en el ámbito logístico.

 

 

¿Cómo un TMS le ayuda a gestionar sus litigios de transporte?

El TMS (Transport Management System) es un software que centraliza la gestión del transporte y de la supply chain:

  • Registra pedidos, facturas, clientes/proveedores, planificación de entregas.
  • Permite seguimiento en tiempo real de la mercancía (escaneos, geolocalización, fotos).
  • Reduce errores humanos gracias a la digitalización y automatización.
  • Facilita la prevención de litigios y la gestión de pruebas en caso de conflicto.
  • Permite rastrear fácilmente quién hizo qué, cuándo y cómo, simplificando el trabajo del departamento de litigios.

¿Por qué utilizar Shiptify como TMS?

Shiptify ofrece un TMS innovador que:

  • Detecta irregularidades en tiempo real y notifica a todas las partes.
  • Registra cada incidencia para un seguimiento transparente y colaborativo.
  • Facilita la comunicación con los transportistas para resolver rápidamente los litigios.
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